El otoño y el invierno son las estaciones donde las enfermedades respiratorias, como la Gripe y la Neumonía, se vuelven más frecuentes. En esta época del año, es fundamental tomar precauciones adicionales para proteger nuestra salud. A continuación, compartimos algunos consejos para mantenerse saludable y evitar contagios.

Vacunación

 La vacunación es una de las mejores maneras de prevenir enfermedades respiratorias graves. Por eso, hay que asegurarse de estar vacunado contra la Gripe y la Neumonía (neumococo) y consultar al médico sobre qué vacunas son necesarias según edad y estado de salud. 

Higiene y Prevención

• Lavado de Manos: Higienizarse las manos frecuentemente con agua y jabón es fundamental. Se recomienda hacerlo antes de comer, después de ir al baño y tras toser o estornudar. El uso de desinfectante de manos con al menos 70% de alcohol también es una buena opción cuando no se dispone de agua y jabón. Conozca la guía de la técnica recomendada por el equipo de Infectología de Sanatorio Modelo Burzaco. 
• Cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar: Con estas simples precauciones es posible evitar la propagación de gérmenes a través de las gotitas respiratorias. Debe utilizar un pañuelo descartable o en su ausencia, la parte interna del codo.
• Uso de Barbijo: Los barbijos quirúrgicos descartables de triple capa pueden reducir significativamente el riesgo de contraer enfermedades respiratorias. Es importante cubrir la nariz y la boca en su totalidad. 

Cuidado del entorno

• Evitar lugares muy concurridos: Siempre que sea posible es importante mantener una distancia segura de otras personas, especialmente en épocas de alta incidencia de enfermedades respiratorias.
• Evitar el contacto con personas enfermas: Si alguien en el entorno presenta síntomas, es mejor mantener una distancia prudente y evitar el contacto cercano hasta que se recupere. Se recomienda tener a disposición un alcohol en gel para sanitizarse las manos cada vez que sea necesario al estar en contacto con el/la paciente o su entorno.

Hábitos saludables

• Alimentación equilibrada: Una dieta balanceada fortalece el sistema inmunológico. Consumir frutas, verduras, proteínas y mantener una buena hidratación contribuye a una mejor defensa contra infecciones. Conozca la recomendación de los expertos.
• Ejercicio Regular: Realizar ejercicio de manera regular ayuda a mantener un sistema inmunológico fuerte. Actividades como caminar, nadar o practicar yoga son beneficiosas y adecuadas para adultos mayores.
• Un buen descanso: El sueño es importante para que el cuerpo se recupere y se defienda de las infecciones. Dormir entre 7 y 8 horas por noche es lo recomendable.

Consultar al médico ante síntomas

Ante cualquier síntoma de enfermedad respiratoria como tos, fiebre o dificultad para respirar, es importante consultar a un profesional de la salud de inmediato. Los fármacos pueden aliviar los síntomas pero es vital no automedicarse. Un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden prevenir complicaciones.

 

Los adultos mayores son más propensos a sufrir complicaciones por enfermedades respiratorias. Estos consejos para mantenerse saludables no sólo protegen a la persona que los incorpora, sino también a toda la comunidad.